martes, 15 de diciembre de 2009

LA MUJER Y EL YOGA



La mujer es muy diferente del hombre en cuanto a su constitución. Sus músculos son delicados y ligeros en comparación con los del hombre que son gruesos y pesados. Así mismo, su estructura esquelética es más fina que la del hombre.
La mujer tiene la capacidad de soportar fatigas físicas y presiones mentales en una medida mucho mayor que puede soportar el hombre, y esto no es debido a su fuerza física o a su capacidad de resistencia sino a un don que la naturaleza le ha concedido y que le permite hacer frente a numerosas circunstancias.
La naturaleza le ha confiado la responsabilidad de perpetuar el género humano.
La riqueza de una nación y la salud de las generaciones futuras dependen del bienestar físico y mental de la mujer.Si las mujeres deciden incorporar en su vida cotidiana la práctica de asanas de yoga (posturas) y pranayama (control del movimiento de la respiración) se verán altamente beneficiadas tanto física como fisiológicamente, equilibrándose a nivel emocional.
El yoga ayuda a la mujer a llevar adelante su trabajo y tareas, y también a conservar un tono de piel luminoso, a brillar de manera natural y potencia su feminidad. No tiene necesidad de maquillarse porque tiene una buena circulación que le da buenos colores.
No es de ningún modo exagerado decir que la práctica del yoga es ideal para ayudar a la mujer en todos los aspectos de su vida.
La práctica del yoga efectuada correctamente aporta ligereza al cuerpo, aptitud en el trabajo, resistencia al dolor y a la enfermedad. Estimula el funcionamiento del sistema respiratorio, circulatorio, digestivo, nervioso, endocrino, uro-genital y la eliminación. Fortifica los órganos internos: hígado, páncreas, intestinos, pulmones y riñones ayudando a eliminar toxinas físicas y emocionales
El resultado es una mente sana en un cuerpo sano ya que el yoga cultiva tanto el cuerpo como la mente.

El cuerpo está formado por diferentes envolturas o koshas:
Las 5 envolturas (koshas) son:
• ANNAMAYA KOSHA: envoltura física
• PRANAMAYA KOSHA: envoltura fisiológica
• MANOMAYA KOSHA: envoltura mental
• VIJÑANAMAYA KOSHA: envoltura intelectual
• ANANDAMAYA KOSHA: envoltura de la felicidad
Estas envolturas se dividen en tres cuerpos:
• KARYA SHARIRA: cuerpo físico, compuesto por ANNAMAYA KOSHA.
• SUKSMA SHARIRA: cuerpo mental, compuesto por PRANAMAYA KOSHA, MANOMAYA KOSHA y VIJÑANAMAYA KOSHA.
• KARANA SHARIRA: cuerpo espiritual, compuesto por ANANDAMAYA KOSHA.
Cuando practicamos asanas, aprendemos a dirigir nuestra atención sobre todas nuestras envolturas, que van del centro al exterior:



Cualquier clase de ejercicio tiene dos aspectos:
1- el movimiento
2- la acción
Las asanas ejercitan tanto la parte anterior como posterior, lateral e interna del cuerpo ya que cada postura conforma un todo en el que cada parte del cuerpo representa una función determinada, sin olvidar ninguna. Aunque las asanas parezcan estáticas exteriormente, están llenas de dinamismo interiormente. No hay ninguna parte del cuerpo o de la mente que se deje de lado cuando se efectúa cuidadosamente un asana. Y esto exige habilidad, inteligencia y aplicación.
Existe una inmensa diferencia entre el yoga y otros tipos de ejercicio físico ya que el yoga crea una consciencia corporal profunda y muy precisa que equilibra la mente.

Todo el mundo puede practicar yoga a cualquier edad. Es especialmente beneficioso a partir de los 40 años, cuando la facultad de recuperación del cuerpo declina y la resistencia a la enfermedad disminuye. El yoga crea energía y no la consume. Nos vuelve enérgicas y llenas de vitalidad.
Es tanto preventivo como curativo, es un método de tratamiento natural. Los progresos son lentos pero seguros. No cuestionamos los avances de la medicina alopática, que pueden hacer grandes favores a las personas en momentos determinados, pero el yoga puede completar sus efectos y acelerar la curación en caso de toma de medicación o de operaciones. El yoga es extremadamente efectivo para reducir los dolores, el malestar y la fatiga.

Para las que practican algún deporte, el yoga puede ayudar a corregir falsos movimientos de los músculos que pueden causar lesiones. Libera de la presión y de las tensiones y confiere al organismo velocidad, elasticidad, fuerza, resistencia y coordinación. Cuando l@s deportistas sufren de agotamiento, pueden recuperar fácilmente energía haciendo asanas.



Así, el yoga es un arte especialmente adaptado a las mujeres con cargas familiares, que deberían alegrarse de tener a su alcance semejantes ejercicios y de poder practicarlos también en la intimidad y el confort de sus domicilios.

La práctica del yoga tiene un efecto inmenso en el carácter y da una tremenda fuerza mental y anímica. Tenemos una actitud más positiva y tolerante frente a la vida. El orgullo y el egoísmo desaparecen, siendo reemplazados por la humildad y la modestia. Aumenta nuestro discernimiento y el intelecto gana claridad. Esto es lo que conduce a un estado de contemplación.

Del libro: "Yoga joyau de la femme" de Geeta Iyengar.