lunes, 17 de mayo de 2010

PRÁCTICA (Abhyasa) Y RENUNCIA (Vairagya)

"Abhyasa vairagyabhyam tannirodhah" (YOGASUTRA 1.12): "La práctica y el desapego son los medios para detener los movimientos de la consciencia".


El estudio de la consciencia y su pacificación es práctica (abhyasa).
El desapego, libertad frente a los deseos o renuncia es vairagya.
- La práctica implica una metodología que requiere esfuerzo. Debe mantenerse ininterrumpidamente durante largo tiempo, con firme resolución, dedicación, atención y devoción, para crear una base estable desde la que adiestrar la mente, la inteligencia, el ego y la consciencia.
- Cuando la mente comienza a arrastrar al que ve de la sede del ser hacia la gratificación del apetito, solo la renuncia puede salva al o a la sadhaka.
- La renuncia es discernimiento discriminador. Es el arte de aprender a ser libre de desear tanto placeres mundanos como eminencia celestial. Implica adiestrar la mente y la consciencia para permanecer incólumes frente al deseo y la pasión. Debemos aprender a renunciar a objetos e ideas que trastornan y obstaculizan las prácticas yóguicas diarias. Luego, hay que cultivar el no apego a los frutos de nuestras acciones.

¿Por qué son esenciales práctica y renuncia?
Práctica y renuncia desempeñan un importante papel en la obtención de conocimiento espiritual. El o la sadhaka necesita cultivar el no apego antes de pensar en la renuncia. Una vez que se comprenden los propósitos de la naturaleza, uno/a debe aprender a desapegarse de ellos a fin de alcanzar un estado de existencia absolutamente independiente en el que el alma irradia su propia luz.
La práctica requiere de 4 cualidades por parte del o de la aspirante: dedicación, celo, atención ininterrumpida y perseverancia.
La renuncia también requiere de 4 cualidades: desconectar de los sentidos de la acción, evitar los deseos, calmar la mente y liberarse de todo anhelo.

Efectos de la práctica y la renuncia
Se da en 4 estados de percepción consciente (samprajñata samadhi o samprajñata samapatti) :
1- vitarca: el buscador/a desarrolla curiosidad filosófica, empieza a analizar con sensibilidad y aprende a comprender las ideas y propósitos de los objetos materiales mediante una perspectiva correcta.
2- vichara: a continuación medita sobre ellos para comprender y conocer por completo los aspectos sutiles de la materia.
3- ananda: después avanza para experimentar el jubilo espiritual de la meditación
4- percibe al Sí-mismo
Tras pasar por estos 4 estados, experimenta:
5- manolaya: un estado tranquilo en el que se pierde la consciencia corporal y no se es molestado/a por la naturaleza, lo que significa conquistar la materia. Este estado es a la vez un logro y un estado de suspensión en el campo espiritual. El buscador/a debe aumentar sus esfuerzos con fe y vigor y utilizar su experiencia previa como guía para pasar del estado de vacío o soledad, hacia el estado de no-vacío de la unicidad o plenitud, donde la libertad es absoluta.

Los obstáculos
Son:
Enfermedad, indolencia de cuerpo y de mente, duda o escepticismo, dejadez, pereza, incapacidad de evitar los deseos, y su gratificación, falsas concepciones, incapacidad de comprender, no ser capaz de concentrarse en lo que se lleva a cabo y avanzar, imposibilidad de mantener la concentración y continuidad en la práctica una vez alcanzadas. Todo se ve agravado por las aflicciones, ansiedades o frustraciones, falta de firmeza corporal y una respiración trabajosa o irregular.

Medios para superar los obstáculos y alcanzar el objetivo.
Son:
Esfuerzo resuelto en la sadhana, cordialidad y buena voluntad hacia la creación, compasión, alegría, indiferencia, no apego tanto frente al placer como al dolor, la virtud y el vicio.
Patañjali también sugiere diferentes métodos para disminuir las fluctuaciones mentales, algunos de ellos son:
- implicarse en un tema u objeto interesante
- retener la respiración tras cada espiración (educa al desapego)
- contemplar una luz brillante, esplendorosa e inafectada